Cuando la maestra Anastasia Istomina cae desde la ventana de una escuela de San Petersburgo (Rusia), el caso es asignado al agente Igor Kryukov, quien sospecha que podría tratarse de un asesinato y no de un suicidio. Poco tiempo después, un estudiante de secundaria también muere. La investigación lleva a Kryukov a familiarizarse con un juego de realidad virtual llamado Esparta, que es popular entre los estudiantes. Pronto se dará cuenta que el entretenimiento no es tan inofensivo como puede parecer a primera vista.