¡La tensión está a punto de estallar de nuevo en la villa de 'Por siempre o jamás'! El reparto de habitaciones dinamita la convivencia de las exparejas. Mario González y Sheila pasan la noche juntos y, lo que en un principio parecía un acercamiento, termina con la pareja protagonizando una explosiva pelea que involucra a todos sus compañeros y que saca a relucir toda la verdad sobre su relación. Celos, infidelidades, lágrimas y muchas dudas sobre su futuro.