Mía acepta la invitación de Daniel, esa misma tarde tienen una cita. Más tarde, Matilda, dispuesta a recuperar su popularidad, arma un caos en la clase de Francisco, él la sanciona pero ella lo acusa con Úrsula. La directora llama a Francisco a su oficina con la excusa de regañarlo, pero termina pidiéndole matrimonio. Como Francisco no acepta, Úrsula lo bota de la escuela. Después, los tatuajes Kanay de Diego se encienden, nadie entiende qué le pasa.